UZBEKISTAN

Un tesoro en la Ruta de la Seda sin explotar.

Samarcanda la ciudad de las mil y una noches. El lugar neurálgico de la ciudad es la Plaza del Registán, flanqueada por las tres Madrazas  de cúpulas turquesas, se convirtió en la Joya del Imperio Timúrida. Samarcanda es layenda y no tiene mar pero es azul…

Un sabio dijo una vez que si Samarkanda es la belleza de la tierra, Bujará es la belleza del espíritu. Es la ciudad más bonita de la Ruta de la Seda. Bujará nos conquistó para siempre. Se cuenta que había más 300 mezquitas y un centenar de Madrazas.

Un consejo disfrutar de la puesta de sol en la terraza de enfrente del minarete Kalon.

Jiva se podría considerar un museo al aire libre. Un lugar recomendable es la Mezquita de Juma con 212 columnas talladas, como si cada una fuese una obra de arte.En la calma de un cielo plagado de estrellas, la ciudad de Jiva, al caer la tarde, permanece en un silencio sepulcral.

Nos cautivaron todos sus Madrazas. Mezquitas y Palacios convertidos en Bazares donde se exhibían bolsos Suzani, telas de Ikats, joyas de influencia Persa…. Un lugar perdido en Asia Central que es un regalo para los sentidos.